Gabo Salazar es el creador y presentador de AutoDinámico, uno de los canales de autos de habla hispana más importantes en YouTube. Se describe a sí mismo como alguien fanático y geek del mundo automotor.
Hace años, la oferta y demanda de los autos eléctricos era contada con los dedos de una mano. No obstante, la popularidad de este sector -actualmente liderado por Tesla- ha mostrado resultados en su crecimiento.
De acuerdo con la Agencia Internacional de Energía (AIE), en 2020 se vendieron en todo el mundo alrededor de 3 millones de autos eléctricos, representando un 40% más que en 2019. Por primera vez, Europa superó a China como el mayor mercado mundial para vehículos eléctricos. En este sentido, el transporte público y de carga eléctricos se expandieron en los principales mercados, alcanzando existencias globales de 600 mil y 31 mil, respectivamente.
Este panorama también se observa en México, donde los compradores están mostrando interés en el mercado de autos eléctricos. “Poco a poco, los autos híbridos empezaron a romper el miedo a la electrificación y a los autos eléctricos”, cuenta Gabo Salazar en entrevista para Estudio Contar.
Gabriel Salazar confirma que el mercado de autos eléctricos en México ha crecido en cuanto a oferta, pero, sobre todo ha crecido en el interés de los consumidores. Bajo esta línea, los consumidores mexicanos analizan e investigan el uso real que le darían a los autos eléctricos y, en consecuencia, comienzan a ser atractivos por los ahorros a largo plazo.
No obstante, aún con el crecimiento experimentado en los últimos años, México aún no alcanza un lugar preponderante en la incursión de la industria de movilidad eléctrica en el mundo. Según la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), las automotrices en la región están acelerando hacia la producción de autos eléctricos e híbridos, pero aún se tiene que ampliar la penetración de dichas tecnologías entre los mexicanos.
Según datos del Instituto Mexicano de Estadística y Geografía (Inegi), en 2020 se comercializaron 24 mil 405 vehículos híbridos, híbridos conectables y eléctricos, representando solo el 3,6 por ciento del total de las ventas de vehículos ligeros en el país. José Zozaya, presidente de la AIMA coincide en que el porcentaje aún es bajo, pero el crecimiento es sostenido.
La idea de comprar y manejar un “auto diferente” aún es lo que domina al consumidor de los autos eléctricos en México. En este sentido, el consumidor promedio de este tipo de autos son familias o parejas de un alto poder adquisitivo.
“El ticket promedio de un auto eléctrico en México es de alrededor de 1.5 millones de pesos”
Gabo Salazar, CEO de AutoDinámico
La parte emocional y emotiva de la compra de un auto domina en este sector, sugiere Salazar. En este sentido, los autos eléctricos en México aún son vistos como una novedad y son consumidos como tal.
El ejemplo perfecto de esto es Tesla, desde un auto eléctrico bailarín hasta un director ejecutivo polémico como Elon Musk, la marca se mantiene permanentemente en la novedad y lo divertido. Asimismo, ha hecho su tarea en ser el primero en lograr la producción masiva de autos eléctricos.
El modelo de negocios de Tesla fue disruptivo, pues, además de vender en línea, a diferencia de otras automotrices, Tesla no vende a través de concesionarios, lo hace directo al cliente.
Una de las desventajas principales del mercado de autos eléctricos en México actualmente es el costo elevado de los vehículos. Como mencionamos anteriormente, el ticket promedio de un auto eléctrico es de 1.5 millones de pesos; en México, el auto eléctrico más barato que un consumidor podría adquirir es el Renault Twizy, con un precio aproximado de 343 mil 200 pesos.
A comparación de sus homólogos de combustión interna, los modelos de autos eléctricos tienden a aumentar considerablemente el precio. No obstante, Salazar indica, en algunos segmentos y modelos, los precios de los autos eléctricos ya se empiezan a equiparar con los de combustión interna.
Por otra parte, si bien cada vez existen autos eléctricos con mejores rangos -tema importante para muchos consumidores mexicanos-, la falta de infraestructura carretera dificulta disfrutar de ello. En este sentido, aunque las ciudades se adaptan cada vez más a la movilidad eléctrica, la infraestructura carretera aún está lejos de ofrecer a los usuarios de autos eléctricos la tranquilidad de encontrar estaciones de carga en estos pasajes.
Asimismo, hay un gran rezago en cuanto al conocimiento de cómo funciona un auto eléctrico por parte de la población y autoridades mexicanas. Según cuenta Gabo, ha encontrado personas que equiparan el funcionamiento de una batería de celular con la de un auto eléctrico.
Finalmente, para incentivar la compra de autos eléctricos para los consumidores mexicanos es necesario tomar acciones contundentes para educar al público, desmentir mitos y bajar los precios este tipo de vehículos. “No es posible incentivar una transición eléctrica sin incentivos de parte del gobierno, con impuestos, descuentos, ventajas de tener un auto eléctrico para convencer al consumidor” sentencia Salazar.
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Mis conocimientos en redacción, análisis de texto, lingüística y literatura han ayudado al equipo de trabajo a generar contenidos de calidad. Feminista, comprometida con la sociedad, amante de los animales y de escribir.